Hoy queremos hablar del sitio en la Costa Blanca, en donde nos encontramos y en donde nuestros clientes eligen construir su nuevo hogar o segunda vivienda.
Altea: ¿qué nos ofrece?
Altea es un bonito pueblo costero pequeño con mucho para ofrecer, lo que hace muy difícil que a alguien no le agrade algo de todo lo que ofrece este sitio. Posee una combinación y variedad que la hace especial. Hablamos de: zonas verdes, sierras, calas con encanto y 8 kms de playa, acantilados, río, cascadas, buena gastronomía, el clima agradable durante casi todo el año, su arquitectura con encanto y vistas singulares desde cada rincón, entre otros. Veremos que no en vano, ha sido denominado uno de los pueblos más bonitos de todo España.
Aquí podemos encontrar actividades para todos los gustos, desde sumergirnos en la tranquilidad de la naturaleza en un placentero sendero, hasta dar un paseo en el casco antiguo de calles empedradas, fachadas blancas, flores y buena gastronomía. También se pueden practicar diferentes deportes náuticos, ciclismo, golf, tenis etc.
Una característica de este pueblo, muy destacable es su respeto por el medio ambiente, el cuidado por los detalles y su encanto natural. Además, Altea tiene mucha vida, desde diferentes fiestas locales que allí se celebran, eventos náuticos o actividades socio-culturales que suelen realizarse.
En cuanto a la gastronomía, al ser un pueblo de origen pesquero, la mayoría de sus platos locales se basan en productos del mar y de la tierra (pescados, mariscos y hortalizas). La cultura gastronómica alteana es muy rica, incluso en la variedad de arroces, maneras de prepararlo e ingredientes. Con tan solo dar un paseo por sus calles, será muy difícil resistirse y no querer probar alguna de sus delicias culinarias.
Altea cuenta con un puerto pesquero y tres puertos deportivos: Campomanes (Marina Greenwich), el Club Náutico de Altea y Porto Senso. Navegar por la costa alteana es sumamente recomendable, ya que desde el mar pueden apreciarse las montañas metiéndose en el mar y descubrir pequeñas calas a las que solo se puede acceder desde el mar, un auténtico privilegio.
Tener una casa en Altea
La mayoría de quienes deciden mudarse a este sitio o construir su segunda vivienda, aprecian la variedad de opciones ofrecidas por esta zona. La geografía del lugar nos proporciona una singular ventaja, que es el poder elegir entre: vivir en el pueblo o más alejados en la montaña, valle, rodeados de verde, con vistas al mar o a la sierra, etc. Según nuestra elección del sitio para vivir, es importante estudiar cómo potenciar e incorporar ese entorno natural en la vivienda. Además de lo que nos ofrece la geografía, al encontrarse entre 2 sierras (la Sierra de Bernia y Sierra Helada), se genera un micro clima especial que permite disfrutar de la terraza hasta en invierno.
En resumen, en Altea es posible vivir rodeado de un entorno natural bonito, con buen clima, en la casa que siempre has soñado y sin renunciar a los servicios que ofrece el pueblo.